En Cansahcab, un caballo perdió la vida tras ser embestido por un toro, sufriendo múltiples corneadas que provocaron su fallecimiento.
En Sucilá, un vaquero resultó herido cuando su caballo fue atacado por un toro; el vaquero fue rescatado y trasladado a un hospital. Estos eventos, que generan ingresos para organizadores y municipios, se realizan en secreto para evitar su difusión y sanción.
A pesar de la prohibición de los torneos del lazo en Yucatán, estos eventos continúan bajo el nombre de “torneos de promesas”.