Morder la medalla se ha convertido en una tradición icónica en las ceremonias de premiación, y los Juegos Olímpicos de París 2024 no han sido la excepción. Pero, ¿sabes por qué se ha vuelto tan popular esta costumbre?
La razón principal es verificar la autenticidad del metal. En el pasado, morder monedas era una manera de comprobar si eran de oro puro, ya que el oro es lo suficientemente blando como para dejar marcas con los dientes.
Técnicamente, solo los medallistas de oro deberían aplicar esta técnica para asegurarse de que el distintivo que reciben sea realmente de oro. Sin embargo, hoy en día, casi todos los atletas que suben al podio muerden su medalla. Esta práctica se ha convertido en una costumbre y, además de lucir bien en las fotos, se ha transformado en un símbolo de victoria.
