En redes sociales circula un conmovedor momento que tuvo lugar en un jardín de niños durante una visita para pláticas sobre un servicio social: dos pequeños, inseparables amigos, destacaron entre el grupo. Uno de ellos, invidente, fue guiado con ternura por su compañero, quien le hablaba al oído mientras lo conducía hacia el salón de clases.
El niño guiador, con un evidente cuidado, le decía: “ya vamos a entrar al salón”, “ten cuidado con el escalón”, “por aquí, vas bien”. Al ingresar, una maestra comentó sobre la especial relación entre ambos, destacando que el niño invidente siempre cuenta con su amigo a su lado, compartiendo momentos de juego, risas y conversación.
Este gesto de amistad y apoyo resalta la importancia de la empatía y la inclusión en la infancia, mostrando cómo la conexión entre los niños puede trascender las barreras y enriquecer sus experiencias.
