La presidenta Claudia Sheinbaum informó que los mexicanos deportados desde Estados Unidos no llegan esposados al país.
Durante su conferencia matutina del 30 de enero, destacó que, al arribar principalmente al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), se realiza una entrevista a los repatriados para verificar si hubo violaciones a sus derechos humanos durante el proceso.
Sheinbaum explicó que los vuelos de deportación son civiles y que se han reforzado los protocolos de atención en el AIFA. Esto ocurre en el contexto de una política migratoria más agresiva por parte de Estados Unidos, vigente desde la administración de Donald Trump.
La mandataria subrayó que los migrantes llegan sin restricciones físicas y se les brinda un espacio para expresar su experiencia.
Como parte de la estrategia “México te abraza”, Sheinbaum anunció la instalación de 10 centros de atención a lo largo de la frontera norte. Estos espacios ofrecerán servicios, programas y apoyos a los migrantes repatriados, incluyendo traslados gratuitos desde los puntos de repatriación hasta sus comunidades de origen.
A su llegada, los migrantes recibirán un kit de higiene personal, su Carta de Repatriación y asistencia para tramitar documentos de identidad, como actas de nacimiento y la CURP. El objetivo es garantizar su reintegración a la sociedad mexicana de manera digna y ordenada.
