Este viernes, Nicolás Maduro fue juramentado como presidente de Venezuela para el período 2025-2031 en un acto celebrado en la sede de la Asamblea Nacional, en Caracas.
Acompañado de la primera dama, Cilia Flores, la vicepresidenta ejecutiva, Delcy Rodríguez, y el presidente de la Asamblea Nacional, Jorge Rodríguez, el mandatario asumió su tercer mandato en medio de cuestionamientos por parte de la oposición.
Durante la ceremonia, Maduro juró con la mano sobre la Constitución aprobada en 1999 y firmada por el expresidente Hugo Chávez. En su discurso, afirmó que este periodo estará enfocado en la paz, la prosperidad y la consolidación de una nueva democracia.
El acto contó con la presencia de figuras clave del oficialismo, como el fiscal general Tarek William Saab, la presidenta del Tribunal Supremo de Justicia, Caryslia Rodríguez, y el ministro de Defensa, Vladimir Padrino López.
El evento, que tuvo lugar horas antes de lo inicialmente programado, estuvo marcado por la ausencia de la mayoría de los mandatarios sudamericanos, aunque contó con la participación del presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, y la canciller de Bolivia, Celinda Sosa. Al ingresar al Parlamento, Maduro fue recibido con honores por cadetes de la Academia Militar.
La juramentación se produce en un contexto de controversia política, ya que la oposición mayoritaria, agrupada en la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), sostiene que el ganador de los comicios del pasado julio fue su candidato, Edmundo González Urrutia. Según el antichavismo, reunieron el 85% de las actas electorales como evidencia del triunfo de González Urrutia, aunque el oficialismo desestimó estos documentos calificándolos como falsos.
El ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, reiteró su lealtad y la de la Fuerza Armada a Maduro, mientras que González Urrutia, en una reciente gira por varios países de América, insiste en que jurará como presidente.
Hasta ahora, el Consejo Nacional Electoral no ha publicado los resultados desagregados de las elecciones, pese a que su cronograma así lo establecía.
