En Finlandia, los jóvenes aprenden a identificar y combatir las noticias falsas desde la secundaria. Este enfoque educativo, integrado en el currículo nacional, busca fortalecer la alfabetización mediática como una habilidad cívica esencial en la era digital.
El modelo combinó esfuerzos de escuelas, bibliotecas, museos, empresas y medios de comunicación. Según el ministro de Educación, Anders Adlercreutz, esta estrategia promueve resiliencia social y fomenta el pensamiento crítico entre los estudiantes.
Durante las clases, adolescentes analizan contenido patrocinado, debaten sobre la influencia de creadores digitales y aprenden a verificar información en plataformas como TikTok e Instagram. Bruno Kerman, un estudiante, destacó la importancia de estas herramientas al señalar que les enseñan a analizar críticamente lo que consumen en internet.
El Instituto Nacional Audiovisual, encabezado por Leo Pekkala, enfatizó que el objetivo es formar ciudadanos críticos capaces de enfrentar los desafíos democráticos.
Aunque Finlandia lidera el Índice de Alfabetización Mediática Europeo, enfrenta el reto de actualizar a las generaciones mayores en el uso responsable de la información digital.
Este modelo educativo, reconocido internacionalmente, podría servir como referencia para otros países que buscan combatir la desinformación y fomentar una ciudadanía informada.