Tras una gira de más de dos años, la banda hizo su última presentación
México, a 8 de diciembre de 2024.- El fin de semana más de 18 mil personas se dieron cuenta de que Maná está más allá del bien y del mal. Para ellos, sus casi 40 años en el escenario les permiten hacer lo que quieran y como ellos quieran, y de eso no dejaron duda con el show que cerró su gira México lindo y querido en el Palacio de los Deportes
Una pantalla que cubría todo el largo del escenario se levantó descubriendo a Maná detrás de ella. Cada uno en su lugar haciendo lo que mejor saben hacer: contar historias con sus canciones desde hace más de 35 años. Fher, con una chaqueta verde aqua y lente oscuro entonó Mándame una señal como primer plato; Alex calentaba los motores en la batería; Juan llevaba el ritmo en su bajo, y Sergio hacía hablar a su guitarra, porque esto apenas comenzaba y pintaba para ponerse bueno.
En el fondo, una pantalla enorme se encendió para mostrar a la banda mientras que la pantalla que se elevaba se partió en cuatro partes para darle un cachito a cada uno de los integrantes que, con De pies a cabeza, le arrancó la voz al público que acompañaba a Fher mientras se paseaba por la pasarela.
Así, con la energía que reciben del público y unos gráficos en dorado y rojo rodeando un corazón, fue como Corazón espinado, un cóver de Santana que Maná llevó a otro público, cobró vida en el Palacio de los Deportes… y lo hizo latir con casi una taquicardia, porque no hay una sola persona en México que no se sepa por lo menos cachitos de las canciones del grupo.
Información El Excelsior