Aunque la temporada de captura de pulpo se extendió hasta el 31 de diciembre de 2024, los pescadores de la zona de Celestún enfrentan dificultades.
Ylmar José Canul Reyes, presidente del Comité de la Zona de Refugio Pesquero, explicó que el pulpo entra en una autoveda natural en estas fechas, dejando de alimentarse de la carnada, lo que reduce considerablemente la captura.
La situación se complica por el mal tiempo. La Capitanía de Puerto ordenó el cierre de los puertos debido a un frente frío que provoca fuertes vientos y oleaje, paralizando las actividades pesqueras.
El Servicio Meteorológico Nacional confirmó que esta semana se esperan vientos del norte y oleaje elevado en Campeche, Quintana Roo y Yucatán.
El Instituto Mexicano de Investigación en Pesca y Acuacultura Sustentables (IMIPAS) consideró viable extender la temporada en las aguas de Campeche, Yucatán y Quintana Roo, debido a que las condiciones meteorológicas afectaron las capturas. Sin embargo, Canul Reyes señaló que la pesca podría no alcanzar las 29 mil toneladas estimadas como límite.
Canul Reyes indicó que, aunque la extensión de la temporada es favorable, el comportamiento natural del pulpo y el mal tiempo dificultan las capturas mediante métodos tradicionales. Además, mencionó que algunos podrían intentar pescar buceando, pero las condiciones del mar no son seguras para esta práctica.
A pesar de los retos, los pescadores esperan que la extensión del periodo permita recuperar parte de las pérdidas ocasionadas por las inclemencias del tiempo y la autoveda natural del pulpo.
