La familia de Cristian Carranza, estudiante de Mecánica en CEDVA, Texcoco, clama por justicia.
La familia de Cristian Carranza, estudiante de Mecánica en CEDVA, Texcoco, clama por justicia después de que dos compañeros lo rociaran con gasolina y prendieran fuego debido al acoso escolar que sufría. A sus 18 años, Cristian era objeto de burlas por no poseer una motocicleta, a diferencia de sus compañeros.
El incidente ocurrió durante una clase en la escuela el pasado sábado, cuando un alumno roció gasolina en el pantalón de Cristian, y otro prendió fuego con un encendedor cuando iba al baño para limpiarse. A pesar de los intentos de sus compañeros y profesor por ayudarlo, las quemaduras de segundo y tercer grado en sus genitales y piernas empeoraron.
Cristian fue trasladado a un hospital donde se atendieron sus heridas, pero sus padres enfrentan deudas médicas superiores a la cobertura del seguro escolar. La Fiscalía General de Justicia del Estado de México ha iniciado una investigación, y la familia exige sanciones tanto para los agresores como para la institución, que carece de protocolos para casos de este tipo.
