Debido a una clara orientación del gasto a obras prioritarias, apoyos económicos y empresas estatales de electricidad y petróleos
Ciudad de México, México, 12 de septiembre del 2023.-La deuda pública de México se incrementará un 59 por ciento durante el Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, debido a una clara orientación del gasto a obras prioritarias, apoyos económicos y empresas estatales de electricidad y petróleos, señaló el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (Ceesp).
Para 2024, el Gobierno de México proyectó que la deuda pública represente un 48.8 por ciento del producto interno bruto (PIB), un aumento de 5.2 puntos del PIB con relación a lo observado en 2018, previo a la gestión de López Obrador.
“Pero la relación deuda/PIB esconde un incremento muy elevado del endeudamiento. Hasta la mitad de este año la deuda pública se ha elevado en 33.5 por ciento respecto a 2018. Y, de acuerdo con las estimaciones del presupuesto presentado, al final del sexenio será 59 por ciento mayor”, abundó el Ceesp.
El viernes, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) del Gobierno mexicano presentó al Congreso el Paquete Económico 2024, el cual contiene el proyecto de presupuesto público y ley fiscal para 2024, así como las principales perspectivas macroeconómicas del país.
En este sentido, el Ceesp señaló que la estimación de crecimiento para el PIB en 2024 de 3 por ciento puntual, en un rango de 2.5 por ciento y 3.5 por ciento, es “optimista”, frente al consenso de analistas privados de 1.7 por ciento.
“Eso causa preocupación sobre la sostenibilidad de las finanzas públicas, ya que la estimación oficial de los ingresos tributarios del erario se basa en ese pronóstico”, indicó.
Para 2024, el Gobierno de México prevé ingresos totales por 7.3 billones de pesos, con la expectativa de que los ingresos tributarios se incrementen de 2.1 por ciento a 6.1 por ciento al compararse con las cifras aprobadas y estimada para este 2023.
“El riesgo es que los ingresos resulten menores a los previstos y que por ello haya un ajuste del gasto o un mayor déficit”, se lee en su punto de vista.
Además, sostuvo que el gasto de 9 billones mantiene una preferencia de orientación “clara”.
“Privilegia el gasto social. Y los apoyos a Petróleos Mexicanos (Pemex) y a Comisión federal de Electricidad (CFE). El gasto en Bienestar crece 25.2 por ciento y en Energía 273.2 por ciento. Dada la voluntad revelada del gobierno, es poco probable que estos rubros se ajusten”, dijo.
También señala que algunos rubros que deberían de ser “los más importantes”, se comprimen micho para el año entrante, como lo es el presupuesto a la Secretaría de Salud por casi la mitad , mientras el incremento a Educación, Seguridad y Protección Ciudadana es de apenas un 1 por ciento.
Y para inversión física se presupuesta una reducción de 23 por ciento para 2024, en tanto que advirtió que “no hay prueba alguna de que los principales proyectos de inversión del gobierno generen crecimiento en el tiempo”.
“Los proyectos de inversión generan crecimiento perdurable solo cuando tienen una relación de beneficio/costo sociales positiva. Ni el tren Maya, ni la refinería de Dos Bocas, ni el proyecto transístmico cuentan con ese estudio -que la ley exige-“, concluyó.