Un niño de 2 años murió por un golpe de calor tras haber permanecido durante algunas horas en un automóvil.
Ciudad de México, México, 10 de marzo del 2023.-Un niño de 2 años murió por un golpe de calor tras haber permanecido durante algunas horas en un automóvil en Port St. Lucie, una localidad de la costa atlántica de Florida en Estados Unidos, por un presunto olvido de su padre, quien fue detenido, el mismo día en que se reportó récord de temperaturas altas en el sur del estado en el mes de marzo.
La Policía de Port St. Lucie informó que el padre del niño, James Fidele, de 37 años, llamó a los servicios de emergencia tras darse cuenta, al cabo de varias horas, de que olvidó sacar a su hijo del automóvil, mencionó este martes el medio local WPBF .
Según informes de las autoridades, los primeros paramédicos que llegaron a la casa comenzaron los trabajos de reanimación antes de transportar al niño a un hospital, donde murió más tarde.
«Este es un incidente muy desafortunado y trágico, y nuestros pensamientos y oraciones están con la familia de la víctima durante este momento difícil», dijo el sargento John Dellacroce, portavoz de la Policía local, en un comunicado difundido por el portal de noticias.
De acuerdo con el Servicio Meteorológico de los Estados Unidos, el lunes 6 de marzo el termómetro marcó 91 grados Fahrenheit (32.7 grados centígrados) en el Aeropuerto Internacional de Miami (MIA), dicha marca, de acuerdo con el Miami Herald superó un récord de 88 grados Fahrenheit (31.1 grados centígrados) establecido el 6 de marzo de 1965.
Al menos 38 niños mueren cada año tras ser olvidados en vehículos
Según el Consejo Nacional de Seguridad (NSC) de Estados Unidos, un promedio de 38 niños mueren cada año tras ser olvidados en vehículos que se encuentran a pleno rayo de Sol en territorio estadounidense.
Los expertos dicen que el cuerpo de un niño se calienta de tres a cinco veces más rápido que el de un adulto y la temperatura del automóvil puede subir 19 grados en 10 minutos.
Dejar a un niño dentro de un vehículo es una situación de muy alto riesgo que solo en Estados Unidos ha dejado desde 1998 hasta el 1 de julio de 2022 un total de 916 menores muertos por un golpe de calor (hipertermia), según datos de la organización No Heat Stroke.